Horacio Juárez

Por Francisco Ríos.

La idea me vino el inicio de la temporada 2005 en el campo de Perros Negros, cuando esperábamos a que Pumas Acatlán y Aguilas Blancas comenzaran su calentamiento, a los lejos vi entrar a Horacio a la cancha, venía platicando con Dwein Juárez su sobrino y QB de las AB’s, parecía una ilusión óptica el verlos juntos cuando por el parecido físico, la tribuna Guinda estaba casi llena y cuando vieron a Horacio de pie le comenzaron a aplaudir, Horacio simplemente agradecía a todos y todos comenzaron a corear su nombre, yo me acerque a Horacio y le pregunté “¿Que se siente?” , el simplemente me dijo: “no se explicarlo es muy bonito”.  

Esto me dio la ida de hacer algo en la página por un joven que le tocó la peor época de nuestro equipo y que se lo echo al hombro para sacarlo adelante, hoy Horacio sigue practicando este deporte, ahora en los Troyanos y del que el año pasado fue designado el mejor jugador de la temporada, en su año de novato.

FR- ¿Cómo llegas a Aguilas Blancas?

HJ - Llego a Aguilas Blancas después de haber estado en Pieles Rojas en intermedia, en Pieles pasaron algunas cosas que no me gustaron y decidí venirme en Aguilas Blancas, yo había estado por varios equipos desde las infantiles, hasta que llegue aquí a mi segunda intermedia.


FR - Llegas al campeonato en el 2000, toda la temporada estuviste como titular y llevas bien el equipo, a pesar en la semifinal te lesionas y no puedes estar en la final.

HJ - Así es como te digo esto es un trabajo en equipo, desgraciadamente en el penúltimo juego me lesiono y tengo que estar en la banca y no jugué la final, pero lo importante era que llegara el equipo a la final, afortunadamente así fue y se ganó.


FR - Ese año subes a mayor y a mitad de la temporada tomas el primer equipo.

HJ - Fue una situación especial, los primeros juegos yo no los puede jugar, hasta el tercer partido fuimos a jugar a Toluca y fue cuando me dieron la confianza y de ahí hasta el Tazón Azteca de este año.


FR - Ese primer año vas a CU y das un juegazo en el triunfo de las Aguilas Blancas, que recuerdas de ese día con las Aguilas Blancas

HJ - Hijole, fue un gran episodio de mi vida, además de que yo era novato, el pisar ese campo que era un sueño para mi, yo de pequeño veía los partidos mi deseo era estar en ese campo.


FR - ¿Que no vas a olvidar de ese día?

HJ - Cuando llegamos al campo nos metieron por la puerta de maratón, la gente de los Pumas nos comenzó a abuchear pero inmediatamente la gente de las Aguilas Blancas nos ovacionaba, fue algo muy especial y luego como novato fue una sensación extraña y gracias a Dios se me dieron los cosas y salimos adelante.


FR - A partir de ese momento el 6 de las aguilas Blancas es una referencia obligada del equipo

HJ - La verdad es una gran experiencia, el que ya de novato te reconozcan tu esfuerzo, aunque en lo personal lo importante era que reconocieran al equipo olvidándote de las estadísticas.


FR - Al año siguiente viene una lesión muy fuerte ante el CEM que te saca toda la temporada

HJ - La verdad fue algo muy difícil, después de haber tenido una buena temporada el estar en esa situación, yo regresé hasta el clásico solo que estaba muy fuera de ritmo, pero aprendí ese año que a veces uno esta arriba y hay que prepararse para cuando estés abajo.


FR - En este tiempo siempre se hablaba a los inicios de cada temporada que si ibas a jugar, que no querías jugar, tu no eres mucho de dar entrevistas, pero te enterabas de los rumores y es más de gente que ya te había visto en otros equipos.

HJ - Si me sacaba mucho de onda, ya que los comentarios eran muy fuertes para con mi persona, yo soy de las personas que me gusta terminar lo que empiezo y el ver comentarios de que me quería ir o que ya estaba en otro equipo la verdad nunca sucedió, al final siempre estuve aquí.


FR - Yo siempre decía que a cambio de esos rumores tu pagabas con buenas actuaciones y en ocasiones echándote el equipo a la espalda.

HJ - La verdad hubo una cuestión muy especial, cuando yo regresé al equipo y en medio de todos los rumores yo platiqué con el Doctor Licea, el me dio la oportunidad de que hablara con mis compañeros para arreglar las cosas, yo les pedí la oportunidad de ganarme mi lugar que me tuvieran confianza, que yo iba a respetar lo que me dijeran los coaches, pero yo quería estar adentro, afortunadamente todos entendieron que yo tenía la camiseta de las Aguilas Blancas bien puesta y le íbamos a echar muchas ganas.


FR - Un momento que es importante fue el juego en Monterrey de 2003, cuando vamos vs los Borregos y estamos a punto de ganar.

HJ - La verdad fue algo muy chistoso que yo después comentaba con mis compañeros, ese día llegamos al Tec de Monterrey no pensando en el equipo que teníamos en frente, llegamos a ese partido no preocupándonos por el tamaño, la fuerza o si eran muy rápidos, yo comenté a la ofensiva que no podíamos cometer errores. Ese juego fue muy espectacular y se pudo haber ganado, ese día el equipo solo tuvo un error y ese nos quito la oportunidad de ganar.


FR – Como seleccionado nacional eres nominado el MVP, poniendo en alto el nombre de Aguilas Blancas

HJ - Yo siento que es más el nombre de las Aguilas Blancas, porque hubo muchas cosas, todo el partido estuve en la banca hasta el último cuarto, cuando me meten el equipo tiene una mejoría, avanzamos y anotamos la gente me decía que el equipo se veía mucho mejor, pero me sacaron y metió el coach a su QB y el termina el partido y acabamos mal, ya no tuve la oportunidad de seguir en el partido.


Aún así Horacio fue nominado el jugador más valioso


FR - Hay un juego muy importante, contra el TEC CCM el 2003, nos jugábamos la permanencia en los 10 grandes, me acuerdo que en ese partido saliste dos veces en brazos del Dr. Lozada y te ayudamos a salir, vi que tu pierna no daba a más, es más recuerdo haberte visto soltar algunas lágrimas cuando te curaba, yo pensaba que era hora que salieras del juego por lo fuerte de tu lesión de la rodilla y en la siguiente ofensiva estabas al frente del equipo

HJ - Es un momento muy difícil, ese partido yo estaba lesionado, además tenía un desgarre, nos jugábamos el todo por el todo y yo no quería dejar al equipo, yo sentía que lo mas importante era hacer bien las cosas, olvidándome de la lesión yo me decía que no podía salir que la lesión tendría mucho tiempo después para recuperarme, no debía abandonar el equipo, la verdad me motivo mucho, además de la gente que me apoyaba en la tribuna, además un psicólogo que me estuvo ayudando, que fue algo vaciado el me pedía que me imaginara un campo con mucha luz y no si recuerdas ese día salió el sol, yo no quería salir del partido con la cabeza abajo, de hecho en la segunda mitad yo le dije al coach que deberíamos salir al todo por todo y el me preguntaba si aguantaría que iban a estar sobre de mi con todo y yo le dije vamos por todo.


FR - Hay una jugada en ese partido, te sacamos y te recuestas al lado de la banca y te infiltran por el dolor en la pierna, te decíamos que descansaras, en la siguiente serie te interceptan un pase y en el regreso hay un fumble que toma Efrén Falcón y tu encabezas la cortina de bloqueo, es más bloqueas a un liniero ofensivo, arrastrando la pierna y de ahí viene la anotación que nos da la permanencia

HJ - Si aparte de que a un QB no nos gusta que nos intercepten y máxime por el momento en como estábamos, yo buscaba que Efrén llegara a la anotación y lo que menos me acordaba era de la lesión e hice todo el esfuerzo que pude con mi pierna, se me dificultaba mucho apoyar pero no me importó.


FR - A partir de ese momento hay una comunión entre Horacio Juárez y la tribuna guinda

HJ - La verdad fue algo muy padre, de ahí teníamos que coachear a la juvenil, yo platicaba con Benavides de ese momento y nunca me imagine que la gente me estimara y me apoyara, pero la verdad ese juego todos salimos satisfechos por el esfuerzo fue importante.


FR - A partir de ahí el grito era Horacio, Horacio

HJ - A veces no me lo creía, es una gran responsabilidad, yo sufría los viernes ya que era mucha responsabilidad el estar al frente del equipo, pero trataba de olvidarme de todo al ponerme el casco, yo soy de las personas que al momento de comenzar el partido olvidarme de todo y concentrarme en el partido.


FR - Llegaste a ver jugar al coach Joaquín Juárez tu hermano

HJ - No tuve la oportunidad aunque siempre por comentarios de mis padres me comentan lo que el había hecho, yo estaba muy chiquito y me llevaban a los partidos y de hecho tengo muchas fotos con el y mis otros hermanos.


FR - El tuvo una gran trayectoria en Lobos Plateados, para ti es una responsabilidad o un reto el que ellos hubieran tenido una gran trayectoria en el FBA en el IPN

HJ - La verdad nunca lo vi de esa forma, ellos me iniciaron en este deporte y me motivaron a practicar este deporte, yo me quedaba a ver videos, me quedaba a entrenar una hora más, a correr a lanzar el balón y ellos querían que yo fuera mejor, gracias a ellos yo le tuve fe a este deporte, ellos me inculcaron la mentalidad de dar todo en el campo no dejar nada a medias, en los entrenamientos me pedían que dejara todo en el campo.


FR - Ahora encausas eso en tus sobrinos, los aconsejas, platicas con ellos.

HJ - No el único que esta apegado a mi es Dwein, desde ese día del juego contra el Tec CCM, el no pudo asistir al campo porque estaba con su papá en CU ya que los Frailes estaban jugando casi al mismo tiempo, pero escuchó el juego por radio y desde ahí el quiso jugar en las Aguilas BLANCAS, el se comenzó a pegar a mi, a mi otro sobrino Joaquín yo lo entrene.


FR - Es más hubieron muchas quejas contra ti ya que en la final de Frailes y Pieles Rojas estuvieras del lado de los del Tepeyac y no del lado de los Politécnicos

HJ - Si creo que es injusto, al Politécnico yo nunca me lo voy a quitar del corazón, mí hermano me pidió al medio tiempo que pegara un poco a Ihary (QB de los Frailes del Tepeyac), que lo tranquilizara y lo apoyara, ya que el sentía que le daba confianza.


FR – Para mucha gente tu eres la cobra o la cobrita por tu hermano.

HJ – Si pero a mi me gusta más que me llamaran el diablo o el diablito, este sobrenombre me lo gane en el casillero de las Aguilas Blancas, ya que siempre estaba molestando o haciendo bromas a mis compañeros y de ahí me comenzaron a decir el “Diablito”, además la Cobra es mi hermano yo soy otro y siempre he buscado tener mi propio estilo.


FR – Que le dirías a toda la gente de Aguilas Blancas que te apoyó

HJ – Muchas Gracias por haber estado ahí y haberme apoyado, espero no haberles defraudado.


Así terminamos esta ligera charla con el “Diablito” Horacio JUAREZ.


En alguna ocasión mucha gente me decía que como una persona tan seria o tan retraída podía ser líder de un equipo, se cuestionaba mucho esto y es cierto, Horacio es muy serio y en ocasiones muy difícil de hacerle reír, posiblemente por que siempre estaba concentrado en el partido o pensando que mandar.


Pero lo que muchos no veían es que cuando había un lastimado Horacio era el primero en estar al tanto de su estado físico, cuando alguien fallaba a una jugada simplemente con verle bastaba para que hubiera un reproche, en los partidos Horacio siempre estaba al lado del coach Diego Rodríguez hablando y analizando el partido.


Recuerdo que en el juego contra los Frailes en Perros Negros, manda un pase largo y Joaquín Silva se equivoca en la trayectoria, cuando hacen la reunión, Horacio da la confianza a Joaquín y vuelve a mandar la bomba y esta vez es buena y anotación.


En lo personal creo que Horacio JUAREZ “el Diablito”, dejó huella en las Aguilas Blancas.

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